El Consejo Asesor Cultural da la bienvenida a Uganda

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De Khatukhira «Khat» Bernard, Kampala (Uganda)

(Nota del editor: Khat vive y trabaja en Uganda como arquitecto y analista financiero. Descubrió El libro de Urantia en 1997, ha sido profesor-facilitador de la Escuela Internacional de El libro de Urantia (UBIS) desde 2015 y ha asistido y presentado en muchas conferencias Urantia. Este trabajo le inspiró para iniciar en Uganda un grupo de estudio llamado «Ciudadanos Cósmicos». Khat cree que el servicio es uno de los mayores regalos que podemos dar a nuestros compañeros de viaje.)

Durante muchos años he disfrutado de una relación virtual con la Fundación Urantia mientras tomaba y facilitaba cursos de la UBIS. Esa relación se hizo más personal, recíproca y duradera en abril de 2019, cuando me invitaron a participar en su Simposio Cultural Global. Se pidió a los participantes que hicieran una presentación sobre su país de origen y pasé muchos meses investigando aspectos de la vida en Uganda: su cultura, tradiciones, religión institucional, política, actitudes personales e incluso niveles de lectura. Si desean ver el vídeo de mi presentación, hagan clic aquí: Simposio Cultural Mundial, Uganda (youtube.com)

En 2024 tengo el privilegio de representar a Uganda en el Consejo Asesor Cultural de la Fundación. Me invitaron a dar una charla durante la reunión trimestral de enero de la junta ampliada.

Uganda es un país de muchas tradiciones y creencias, principalmente el islam y el cristianismo, pero también religiones indígenas. Ha habido un cambio gradual del culto y las creencias comunales o sociales a la búsqueda individual de la verdad, lo que es un buen presagio para la difusión de El libro de Urantia y sus enseñanzas.

Las actitudes tradicionales de la mayoría de los ugandeses tienden a favorecer a las comunidades cerradas, pero la gente se está abriendo poco a poco a nuevas ideas, formas y filosofías. La libertad de expresión se ha consagrado en la Constitución de Uganda, junto con el reconocimiento y la aceptación de otras instituciones religiosas por parte del gobierno.

Sin embargo, sigue habiendo retos. Las agencias gubernamentales y las autoridades relacionadas deben ser informadas sobre lo que son El libro de Urantia y la Fundación Urantia. Dado que las tradiciones religiosas tradicionales y los sistemas de creencias siguen siendo fuertes, muchos ugandeses son reacios a aventurarse fuera de la norma y adoptar nuevos conocimientos. Temen la percepción de la sociedad y temen perder la fe y las creencias que siempre han creído verdaderas. La juventud no está bien educada para adoptar nuevas ideas y conocimientos.

Desde un punto de vista práctico, los ugandeses tienen una cultura de lectura muy pobre. Internet no es accesible ni está disponible de forma sistemática, y los dispositivos digitales son muy caros.

Educar al público sobre las enseñanzas de El libro de Urantia no será fácil para una población acostumbrada a que se le impongan creencias. Sin embargo, muchos somos optimistas y creemos que El libro de Urantia y sus enseñanzas pueden elevar la cultura ugandesa. Hay beneficios educativos y espirituales, por supuesto, pero lo que me parece más emocionante es la perspectiva de iluminar la verdad sobre Dios, la ciencia y nuestro lugar en el universo, al tiempo que se aclara el papel de las supersticiones y las tradiciones arraigadas en la evolución social humana.

¿Qué podemos hacer para sembrar El libro de Urantia en Uganda? Debemos demostrar la legitimidad de la Fundación Urantia cultivando la consciencia de su propósito, funciones y objetivos. Los seminarios públicos, conferencias y talleres ayudarán a afianzar la credibilidad. Se necesitarán ejemplares de El libro de Urantia y materiales de lectura relacionados. Hay que formar grupos de estudio locales, como «Ciudadanos Cósmicos» en Uganda, y fomentar la correspondencia regular entre ellos. Estos grupos necesitarán mentores. Los proyectos basados en la comunidad podrían ser defendidos y gestionados por compañeros lectores de todo el mundo. Y por supuesto, deben continuar los proyectos actuales como la difusión de El libro de Urantia.

En agosto de 2022, la Fundación Urantia, la Asociación y la Fellowship patrocinaron una conferencia en la ciudad de Jinja, en el nacimiento del Nilo Blanco (uno de los dos principales afluentes del río Nilo), cerca de la orilla norte del lago Victoria. Esto es solo el principio. Algún día, El libro de Urantia será un texto familiar en Uganda.